Día de la Felicidad
Estudiantes de diseño de Mannheim propagan un "Ministerio de la Felicidad y el Bienestar".
Ya Aristóteles sabía de la aspiración del ser humano a la felicidad y la vio relacionada principalmente con la vida en comunidad. Los padres de la Declaración de Independencia de Estados Unidos hicieron de la aspiración a la felicidad incluso un derecho de rango constitucional. Todos los seres humanos tienen derecho a "Life, liberty and the pursuit of happiness". El Reino de Bután es conocido por haber hecho de la felicidad un objetivo de Estado. Según esa idea, la política se debe guiar no solo por los indicadores económicos sino también por el bienestar de los habitantes.
Todo esto recuerda al "Día Mundial de la Felicidad" que las Naciones Unidas celebraron por primera vez el 20 de marzo de 2013. "El mundo necesita un nuevo paradigma económico que reconozca la equivalencia de los tres pilares del desarrollo sostenible", destacó el secretario general de la ONU Ban Ki-moon. "El bienestar en las áreas de desarrollo social, económico y ecológico son inseparables."
"Work-Life-Balance" y "Generación Y"
También en Alemania se plantea la felicidad en muchos debates sociales, aunque el término como tal no siempre se pronuncia. Pero se habla de "Work-Life-Balance" de la joven "Generación Y", que enfoca sus prioridades más en la vida privada que en explotar al máximo todos sus recursos para avanzar en su carrera profesional. ¿Cuál es la vida que queremos? ¿Qué es importante para nosotros? ¿Y hasta qué punto deben el Estado y la sociedad hacer esfuerzos por incrementar el bienestar general?
El "Ministerio de la Felicidad y el Bienestar" de Alemania busca respuestas a estas preguntas. Este título, de apariencia oficial, es parte de una campaña de comunicación de jóvenes diseñadores. El proyecto ha sido desarrollado en la Facultad de Diseño de la Universidad de Mannheim. "Nuestro deseo es claro e inequívoco", dice Gina Schöler y Daniel Clarens, quienes hicieron de esta campaña el tema de su tesis de maestría. "Siguiendo el ejemplo de Bután, apostamos por el concepto de felicidad nacional bruta." A través de los medios sociales, pero también con acciones callejeras y la convocatoria al envío de "felices historias", los autoproclamados embajadores de la felicidad se proponen "desatar un debate que cobre fuerza en toda Alemania". También la canciller Angela Merkel se informó acerca del índice de felicidad de Bután en el Foro Internacional de Alemania en la Cancillería federal.
Día Mundial de la Felicidad, el 20 de marzo
