Ir al contenido principal

Alemania apuesta por el hidrógeno verde

Una estrategia nacional del hidrógeno contribuirá a impulsar el uso del hidrógeno verde en la economía alemana.

13.09.2023
El hidrógeno verde, tema en la Feria de Hannover
El hidrógeno verde, tema en la Feria de Hannover © picture alliance/dpa

Una transición energética exitosa es como un complicado mosaico formado por muchas partes. La transición hacia las energías renovables, por ejemplo, exige no sólo la construcción de plantas solares y turbinas eólicas, sino también nuevas líneas eléctricas y estaciones de carga para coches eléctricos. El hidrógeno verde constituye también una pieza importante en el mosaico de la transición energética: su utilización contribuirá decisivamente a que Alemania se convierta en un país industrializado climáticamente neutro en 2045. El Gobierno alemán apoya el uso de gases respetuosos con el medio ambiente a través de una Estrategia Nacional del Hidrógeno.

¿Qué es el hidrógeno y por qué puede contribuir a la transición energética?

El hidrógeno es el elemento más abundante en el universo. En la Tierra, el gas inodoro H2 está presente de forma combinada, principalmente en el agua (H2O). Por tanto, puede utilizarse básicamente en grandes cantidades. Al quemar hidrógeno con oxígeno sólo se produce agua y no se generan gases de combustión dañinos para el medio ambiente.

Para que el hidrógeno se convierta realmente en un componente importante de la transición energética, la producción de este gas también debe ser respetuosa con el clima. Así pues, sólo hablamos de hidrógeno verde cuando éste se produce por electrólisis mediante electricidad renovable. En contraste, para el hidrógeno gris, por ejemplo, se utiliza gas natural. La consecuencia: su producción genera grandes cantidades de dióxido de carbono (CO2), un gas de efecto invernadero perjudicial para el clima.

¿En qué ámbitos puede utilizarse el hidrógeno?

Las posibles aplicaciones son múltiples. Por ejemplo, en el futuro el hidrógeno se usará en las modernas centrales eléctricas de gas para la generación de electricidad. Estas centrales deberán estabilizar la red eléctrica en el futuro, ya que la producción de energía eólica y solar fluctúa mucho por su propia naturaleza. El hidrógeno también es clave para la movilidad del futuro: gracias a ella, el tráfico de camiones, barcos y aviones será más respetuoso con el medio ambiente.

Y por último, pero no menos importante, el hidrógeno también es fundamental para la pretendida transformación de la economía alemana. Un ejemplo es la industria siderúrgica, que demanda una gran cantidad de energía: el grupo industrial Thyssenkrupp, por ejemplo, se ha propuesto para 2050 producir exclusivamente acero climáticamente neutro utilizando hidrógeno. El hidrógeno es la “tecnología clave para conseguir que nuestra industria esté preparada para el futuro y sea sostenible”, afirma el director financiero de Thyssenkrupp, Klaus Keysberg.

¿Qué objetivos persigue la Estrategia Nacional del Hidrógeno?

Ya en 2020, el Gobierno alemán de entonces sentó las bases con una Estrategia Nacional del Hidrógeno para que el hidrógeno verde contribuyera a la transición energética. En el verano de 2023, el gobierno presidido por el canciller Olaf Scholz decidió continuar desarrollando esta estrategia. El gobierno acordó, entre otras cosas, duplicar el objetivo de capacidad de producción anterior: para 2030, se espera que las posibilidades de generación en Alemania aumenten al menos hasta 10 gigavatios en lugar de 5 gigavatios. También se construirán las infraestructuras necesarias: hasta 2028 debería existir una red inicial con más de 1.800 kilómetros de tuberías de hidrógeno.

“Invertir en hidrógeno es invertir en nuestro futuro: en protección climática, en puestos de trabajo cualificados y en seguridad de abastecimiento energético”, afirmó el ministro alemán de Economía, Robert Habeck, en la presentación de la nueva estrategia en julio de 2023. La ministra alemana de Investigación, Bettina Stark-Watzinger, subrayó: “El hidrógeno es la pieza que falta para completar el rompecabezas de la transición energética.”

¿Alemania apuesta también por la cooperación internacional para el hidrógeno?

Alemania no podrá satisfacer por sí sola la demanda de hidrógeno verde. El ministro de Economía, Habeck, estima que habrá que importar alrededor de dos tercios del hidrógeno necesario. El Gobierno alemán apuesta para ello por numerosas cooperaciones internacionales. El Gobierno alemán mantiene numerosas asociaciones estratégicas internacionales con países del sur y el oeste de África, por ejemplo, así como con Australia. Esto se debe a que las condiciones en estos países son especialmente favorables para producir hidrógeno a partir de la energía eólica y solar. Al fin y al cabo, sólo así podrá el hidrógeno desempeñar el papel clave esperado en la transición energética mundial.