Reem Alabali-Radovan: “Respeto, más allá del estatus y la procedencia”
La ministra de Cooperación Económica y Desarrollo llegó a Alemania siendo niña como hija de refugiados, y su trayectoria es realmente destacable.

Nadie contaba con ella: Reem Alabali-Radovan es la nueva ministra de Cooperación Económica y Desarrollo en el gabinete del canciller federal Friedrich Merz. La socialdemócrata de 35 años cuenta, por ahora, con poca experiencia en este ámbito. Pero no está sola en esa situación: muchos de quienes la precedieron también tuvieron que ponerse al día en materia de cooperación al desarrollo. En el anterior Gobierno, Alabali-Radovan, que se afilió al SPD en 2021, fue secretaria de Estado para Migración, Refugiados e Integración, además de responsable de la lucha contra el racismo.
Nacida en Moscú, hija de padres iraquíes
Alabali-Radovan nació en 1990 en Moscú, donde sus padres, originarios de Irak, estudiaban ingeniería. Regresaron temporalmente a la región autónoma del Kurdistán, pero, como contó Alabali-Radovan al semanario “DIE ZEIT”, quedarse era impensable porque su padre participaba en la resistencia contra Sadam Husein. En 1996, la familia huyó a Alemania, obtuvo asilo y se instaló en Mecklemburgo-Pomerania Occidental. Esa experiencia, según afirma la politóloga, marca su forma de hacer política y refuerza su convicción de que Alemania debe asumir una responsabilidad global.
Alabali-Radovan tiene una formación cultural diversa y habla varios idiomas, cualidades que encajan bien con su nuevo cometido. Además, cuenta con experiencia en política local y regional en Mecklemburgo-Pomerania Occidental, y conoce de primera mano las dificultades de una región con carencias estructurales. Eso podría ayudarle a desempeñar su nuevo cargo bajo el lema del desarrollo: “Piensa globalmente, actúa localmente”.
La cooperación al desarrollo como parte de la política de seguridad
La cooperación al desarrollo necesita un nuevo enfoque, afirmó Alabali-Radovan en su primer discurso ante el Bundestag como ministra. Forma parte, junto con la política exterior y la de defensa, de una “política de seguridad integrada” y, por tanto, responde al interés de Alemania. La nueva ministra subrayó también que el objetivo es combatir el hambre y la desigualdad junto a los socios del sur global y cuestionar las estructuras de poder injustas.
Alabali-Radovan está casada con un boxeador profesional y ella misma practica boxeo en su tiempo libre. “En los gimnasios de boxeo reina un gran respeto; allí todos se tratan de igual a igual, sin importar el origen o el estatus. Eso es algo que me fascina. “Y ojalá hubiera más de eso en la política.”