Diversidad enriquecedora
Alemania es un país abierto al mundo, caracterizado por la pluralidad de estilos de vida. En los próximos años el cambio demográfico tendrá una gran incidencia.
Con alrededor de 81,2 millones de habitantes, Alemania es el país más poblado de la Unión Europea. Como país moderno y abierto al mundo, se ha convertido en un importante país de inmigración. Más de 16,4 millones de personas tienen origen inmigrante. Hoy en día Alemania tiene una de las legislaciones más liberales del mundo en materia de inmigración. Según un estudio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) de 2014, es el segundo país de inmigración más atractivo del mundo, por detrás de los EE.UU.
La mayoría de la población tiene un nivel de vida alto en términos comparativos y, en consecuencia, disfruta de notables márgenes de autonomía individual. El Informe sobre Desarrollo Humano 2014 de las Naciones Unidas sitúa a Alemania en el sexto puesto entre 187 países. En el Nation Brands Index 2014, una encuesta internacional sobre la imagen de 50 países, Alemania ocupa la primera posición por, entre otras razones, sus buenos datos en calidad de vida y justicia social. Alemania es un Estado social que se plantea como tarea prioritaria la protección social de todas y todos sus ciudadanos.
La sociedad se caracteriza por la pluralidad de estilos de vida y la diversidad de adscripciones etnoculturales. Las nuevas formas de vida y realidades vitales transforman la cotidianeidad social. Los inmigrantes enriquecen el país a través de nuevas perspectivas y experiencias. La sociedad se muestra abierta y respetuosa ante los proyectos de vida alternativos y las diversas orientaciones sexuales. La igualdad de las mujeres y los hombres avanza, la tradicional asignación de roles entre los sexos está superada. Las personas con discapacidad se incorporan crecientemente a la sociedad.
Un factor determinante para el futuro del país es el cambio demográfico. Desde finales de la década de los noventa el índice de fecundidad se mantiene permanentemente bajo, situándose en 1,4 hijos por mujer, en tanto que simultáneamente crece la esperanza de vida. Según estimaciones de diversas instituciones, de aquí al año 2050 la población de Alemania disminuirá en unos siete millones de personas. El creciente porcentaje de personas mayores supone al mismo tiempo nuevos retos para los sistemas de seguridad social.
El cambio socioeconómico de los últimos años ha conducido a la aparición de nuevas situaciones de riesgo social y una perceptible mayor fragmentación de la sociedad en función de las condiciones económicas de vida. Aunque en 2014 la cifra de desempleados se redujo hasta niveles no vistos desde el año 1991 (media de 2,7 millones), lo cierto es que casi una de cada seis personas está en riesgo de pobreza, siendo los jóvenes y las familias monoparentales los grupos más vulnerables. También siguen existiendo diferencias sociales entre los Estados Federados orientales y los occidentales.