Consejo Ministerial de la OSCE en Hamburgo
Frank-Walter Steinmeier, ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, hace un balance positivo después del Consejo Ministerial de la OSCE en Hamburgo.
Dos días, más de 40 ministros de Relaciones Exteriores y las grandes cuestiones de la seguridad en Europa: el Consejo Ministerial se llevó a cabo bajo el signo de conflictos políticos y grandes debates. La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) demostró de qué es capaz: la conferencia fue un espacio para el diálogo y el entendimiento más allá de todas las diferencias ideológicas y políticas.
“Serios peligros para la paz y la seguridad, incluso la cuestión de la guerra y la paz han regresado a Europa y también a nosotros, en Hamburgo”, dijo Frank-Walter Steinmeier, el ministro alemán de Relaciones Exteriores. Que los conflictos y tensiones en relación con la situación en el este de Ucrania y la anexión de Crimea no podían solucionarse de la noche a la mañana, ya estaba claro en los prolegómenos, agregó.
Para Steinmeier, el Consejo Ministerial de la OSCE fue justamente por eso una importante señal. “Si no existiera la OSCE, habría que inventarla”, dijo Steinmeier. Detrás de bambalinas tuvieron lugar numerosas conversaciones. Steinmeier intercambió puntos de vista sobre las cuestiones de seguridad globales más urgentes, también con sus homólogos norteamericano, John Kerry, y ruso, Serguéi Lavrov.
En una declaración final de la Presidencia, las partes en conflicto en Ucrania son llamadas a implementar por fin las reglas acordadas en el Acuerdo de Minsk. Mucho apoyo recibió la iniciativa de Steinmeier de desarrollar un nuevo mecanismo para el control del armamento convencional.
La “Troika”, compuesta por Alemania, Austria e Italia, decisiva para el trabajo de la OSCE, declaró el desarme como una de sus cuatro prioridades. La “Troika” de la OSCE está compuesta por el país que ejerce la Presidencia, su antecesor y su sucesor. Su composición cambia todos los años.
En el Consejo Ministerial se debatió no solo sobre el conflicto en Ucrania. Desde las migraciones hasta la ciberseguridad: el Consejo Ministerial aprobó más de diez resoluciones sobre una vasta gama de temas.
Frank-Walter Steinmeier dijo al respecto en su discurso de cierre: “Proporcionamos impulsos para mejorar la posición de la OSCE en la lucha contra el terrorismo. Y tematizamos la política con respecto a las armas pequeñas, los datos de los pasajeros de aerolíneas y los desafíos en el ciberespacio”.
Steinmeier subrayó además: “En el tema del control de armamento hemos dado un decisivo paso adelante. Y, con una declaración en relación con el conflicto en Transnistria en el formato 5+2, pusimos el foco en un conflicto regional. Eso demuestra que, si cooperamos pragmáticamente, es posible avanzar, también en cuestiones complicadas”.
Con el Consejo Ministerial de la OSCE finaliza también el año de la Presidencia alemana de la OSCE. Alemania tomó el timón en tiempos turbulentos, dijo Steinmeier. “Todo el año exigió a todos –desde el capitán hasta el maquinista– capacidades de alta mar, en vista del oleaje político y las tormentas en todas las estaciones del año”, agregó Steinmeier y agradeció a la Secretaría de la OSCE por la buena cooperación. Austria asume la Presidencia de la OSCE para el año próximo.
