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Los emprendedores alemanes

Los emprendedores alemanes cuentan en Alemania con confortables condiciones para fundar empresas; no obstante, algunos obstáculos hay.

24.10.2013
picture-alliance/Robert Schlesinger - Start-Up
© picture-alliance/Robert Schlesinger - Start-Up

La infraestructura es buena, las condiciones marco legales ofrecen seguridad y el poder adquisitivo es alto: “Todo eso conforma un buen entorno para que jóvenes empresas puedan crecer”, dice Tobias Kollmann, profesor de E-Businessy E-Entrepreneurship en la Universidad de Duisburgo-Essen. Muchas de las 350.000 fundaciones de firmas en Alemania en 2012 fueron empresas unipersonales. Para hacer realidad el sueño de la empresa propia, sus propietarios recurrieron sobre todo a sus ahorros, según una encuesta del Ministerio Federal de Economía. Similares son las condiciones en las que comienzan sus actividades pequeñas nuevas empresas que apuestan por modelos de negocios innovadores y un rápido crecimiento de la facturación y el número de clientes. Si la empresa quiere crecer, sin embargo, se topan con dificultades.

En Alemania casi no se realizan grandes inversiones en empresas jóvenes, dice Kollmann, “por eso, en ese sector es necesario proporcionar nuevos impulsos”. La asesoría de empresas McKinsey propuso recientemente crear un fondo privado de 100 millones de euros solo para empresas en Berlín, a efectos de poder financiar inversiones de más de tres millones de euros. Hasta ahora, para poder crecer, una de cada cuatro nuevas pequeñas empresas recibió capital de fuera de la Unión Europea, según una encuesta de la Asociación Alemana de Start Ups. Un inversionista de Estados Unidos es visto a menudo como la solución óptima: no solo aporta por lo general más fondos y posibilita el acceso al mercado estadounidense, sino que dispone además de una mayor red de socios, se lee en el estudio.

Dificultades existen también para contratar los expertos técnicos necesarios, ya que la demanda de egresados de carreras técnicas supera ampliamente a la oferta. Observadores ven también en esa área necesidad de realizar reformas, que podrían comenzar ya en la escuela con una asignatura de empresariado. “Alemania posee el potencial no solo para ofrecerle a sus propios jóvenes emprendedores un futuro en nuevos sectores de crecimiento, sino también para dar oportunidades a emprendedores y expertos de otros países”, concluye Kollmann.

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