Teatro de marionetas político de Colombia

Una sala oscura con el suelo negro. Los focos iluminan el centro del escenario. En una pantalla se muestran imágenes de paisajes colombianos tomadas por drones. En la pantalla van apareciendo y desapareciendo rostros. En ella pueden verse a los expresidentes colombianos Álvaro Uribe Vélez y Ernesto Samper Pizano, a los narcotraficantes Pablo Escobar y Gilberto Orejuela, así como al periodista Guillermo Cano Isaza, asesinado en 1986. Delante de la pantalla de vídeo está Omayra Martínez Garzón, artista colombiana que presenta su obra en Fráncfort del Meno.

Hoy, Martínez Garzón ensaya para el estreno. Se encuentra en la sala de teatro, aún vacía, del Frankfurt LAB, un conocido centro de producción y representación de artes escénicas contemporáneas de la región del Rin-Meno. Aquí se desarrolla la iniciativa “¡Frankfurt Moves!”, en colaboración con la Fundación KfW. Durante una estancia de cuatro semanas en Fráncfort del Meno, artistas internacionales desarrollan un nuevo programa y lo presentan al público. La Fundación KfW financia la estancia.  Este año, además de Martínez Garzón, residente en Argentina, participan artistas de Vietnam y Sudáfrica.

Delante de la pantalla hay una mesa con una casa de muñecas. Después de sostener carteles en el aire, por ejemplo con la inscripción “Corrupción”, y de tirarse al suelo, Martínez Garzón empieza a recrear la vida rural colombiana con pequeñas figuras de personas y animales. Una cámara proyecta la representación de marionetas en la pantalla. De fondo suena la canción popular “Esperanza”, un “pasillo” tradicional. Martínez Garzón es consciente de que muchos espectadores de Alemania no entenderán las referencias a la historia colombiana y latinoamericana: “Mi intención es que el público se haga preguntas sobre Colombia.”

El arte de Martínez Garzón tiene a menudo connotaciones políticas, pero no exclusivamente. Ella se ve a sí misma como una artista multitemática y multimedia. “Me gusta trabajar con diferentes lenguajes artísticos. Mi lengua materna es el teatro de marionetas, pero también lo combino con representaciones videográficas o con el dibujo.” Dice estar influida por el artista francés de instalaciones Christian Boltanski, la directora argentina de teatro documental Lola Arias y la pintora surrealista hispano-mexicana Remedios Varo.

“Kurt Cobain ha muerto.” En una pantalla más pequeña situada delante de la mesa se reproducen titulares de 1994. Es el año en que Martínez Garzón y su familia abandonaron su pueblo natal de Chía, en el interior de Colombia. Ahora vive en Argentina y ha actuado ya como artista en Rumanía, España, Chile, México, Brasil y Ecuador. “Viajo mucho, pero me gustaría viajar mucho más.” Está entusiasmada con su estancia en el Frankfurt LAB, tanto por la supervisión artística como por el contacto con los demás artistas internacionales. “Intercambiamos puntos de vista sobre nuestros proyectos y los procesos subyacentes, y sobre todo sobre los sentimientos que se esconden detrás de nuestros proyectos. Y vamos juntos al teatro o a tomar algo.”

Esta interconexión entre artistas es precisamente el objetivo de la iniciativa “¡Frankfurt Moves!”. “Cuando estos grupos de becarios trabajan juntos en el Frankfurt LAB ocurre algo realmente emocionante”, explica Daniela Leykam, responsable de Arte y Cultura de la Fundación KfW, que hace posible la iniciativa. “Aquí se juntan una DJane argentina con una pareja de bailarines nigerianos. Surgen colaboraciones artísticas más allá de estas fronteras nacionales, pero también se forjan amistades.” La directora de proyectos del Frankfurt LAB, Jenny Flügge, añade: “Esto es bueno para la escena artística de Fráncfort y, por supuesto, para los y las artistas que participan.” Ella asiste a los seis artistas que se enfrentaron a 250 candidatos en un proceso de selección. En el caso de la artista colombiana Omayra Martínez Garzón, la visión de la iniciativa ha funcionado. Ella lleva su arte al escenario en Alemania y para su largo viaje se lleva en la maleta muchos nuevos contactos y experiencias.