A salvo en el mundo digital
“No queremos ser un freno”: una entrevista con Mandy Schiefner-Rohs sobre los peligros en la red y las oportunidades del aprendizaje digital.
Profesora Schiefner-Rohs, usted investiga las interrelaciones entre el desarrollo escolar y la digitalización. ¿Hasta qué punto navegan los escolares alemanes –y sus profesores– por la red de forma segura?
Schiefner-Rohs: El tema de la seguridad de los datos, pero también de la alfabetización informática, es crucial y ha cobrado aún más importancia durante la pandemia de coronavirus, especialmente en las escuelas a través del aprendizaje en línea. Otros países como Holanda, Australia o Estados Unidos tienen más experiencia en ese sentido. Australia lleva experimentando con la enseñanza a distancia desde los años sesenta. En Alemania estamos sensibilizando ahora también a la gente respecto al uso responsable de los datos de los usuarios y fomentando la conciencia del uso crítico de la información en la red. Los docentes son aquí importantes multiplicadores.
¿Cuáles son los retos?
Todos sabemos que 123456 no es una contraseña segura, y sin embargo es la más común en todo el mundo. Todos sabemos que no tenemos por qué alimentar a los motores de búsqueda y que demasiadas cookies nos dan dolor de estómago, pero la mayoría de los servicios son simplemente muy cómodos. A grandes rasgos, la alfabetización informática apunta a dos temas. Primero, los conocimientos estadísticos, es decir, que los alumnos sepan interpretar qué dicen los números y sus correlaciones o los gráficos que encuentran en la red y hasta qué punto son fiables. Segundo, se trata de que sepan manejarse críticamente con la información y los medios sociales, o sea, que posean una educación básica en el uso de los medios de comunicación, tal como fue presentada por la Conferencia de Ministros de Educación y Cultura con la estrategia “Educación en el mundo digital”, revisada en 2021. Se trata de cómo las escuelas pueden acompañar el desarrollo de los niños y jóvenes en el mundo digital.
¿Es aquí donde usted entra en juego con su investigación?
Sí. Trabajamos con docentes en estudios de casos concretos. Por ejemplo, abordamos la cuestión de qué ventajas o desventajas tiene que un niño aprenda vocabulario a través de una aplicación. ¿Qué datos se generan, hasta qué punto son seguros y hasta qué punto es fiable la información de que un niño ha aprendido, por ejemplo, el diez por ciento de un vocabulario? Queremos que los docentes reflexionen sobre los datos y no que frenen a los niños y jóvenes. Abordamos las oportunidades, pero también dirigimos la atención hacia eventuales problemas.
¿Por qué cree que estos temas deben tratarse en las escuelas?
Considero que es tarea de las escuelas que docentes cualificados y sensibilizados enseñen a los alumnos a utilizar los medios de comunicación y los datos. Si ello siguiera siendo responsabilidad exclusiva de las familias, aumentarían aún más las desigualdades: hay padres muy versados, pero otros padres no pueden hacerlo. Sus hijos deberían tener, sin embargo, las mismas oportunidades.
La Prof. Dra. Mandy Schiefner-Rohs es docente de Pedagogía General con especialización en educación escolar en la universidad de ciencias aplicadas RPTU Kaiserslautern-Landau. Sus investigaciones se centran en los medios de comunicación, la pedagogía escolar y la digitalización.
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