Viajar por Alemania durante todo el año

Bosques frondosos, ciudades vibrantes, playas espectaculares, cumbres imponentes... Alemania lo tiene todo. Con tanta variedad, elegir un destino de vacaciones no siempre es fácil. Te proponemos ideas para cada mes del año. 

Primavera 

Marzo 

Los primeros signos de la primavera aparecen en Zavelstein, en la Selva Negra: cada año, cientos de crocus silvestres asoman sus cabezas lilas entre la tierra. También en la Ruta del Vino, en Renania-Palatinado, los almendros empiezan a cubrirse de flores rosas. Lo mejor es disfrutar de este espectáculo haciendo senderismo o en bici. 

Abril 

La floración de los cerezos es todo un espectáculo en Bonn o en los jardines del castillo de Schwetzingen. La noche del 30 de abril llega uno de los momentos más escalofriantes del año: en la Noche de Walpurgis, las brujas bailan en el Brocken, la cima más alta del Harz. Numerosas fiestas en la región mantienen viva esta tradición. 

Mayo 

En muchas localidades del sur de Alemania, el 1 de mayo se levanta el tradicional árbol de mayo. Este simboliza la primavera y se adorna con cintas de colores. Una vez levantado el árbol, la fiesta continúa con comida y baile. Más tranquilo es el ambiente en el bosque de Spree. La mejor forma de descubrirlo es remando por sus canales. Y para el camino, que no falten los clásicos pepinillos del Spreewald. 

Verano 

Junio 

En junio los días se alargan y las noches se acortan – es el momento perfecto para disfrutar de todo tipo de eventos. En el norte de Alemania, la Semana de Kiel, el mayor evento de vela del mundo acompañado de una gran feria popular, atrae a multitudes. Además, arranca la temporada de festivales, con “Rock am Ring”, en la región de Eifel, como uno de los más importantes. 

Julio 

El agua es la mejor aliada para refrescarse en los días de calor. En las playas del mar del Norte y del Báltico puedes darte un baño, o explorar los imponentes acantilados de tiza en la isla de Rügen. En el extremo sur se encuentra el lago de Constanza, el mayor de Alemania. Ya sea nadar, navegar o recorrer el lago en bici, tú eliges. 

Agosto 

En esta época del año, el brezal de Luneburgo, en el norte, se tiñe de tonos violetas. Recorre sus suaves colinas y contempla a las ovejas pastando. En el este, el Reino de los Jardines de Dessau-Wörlitz ofrece rincones sombreados ideales para relajarse. Descubre este conjunto declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, con sus palacios y jardines, donde ya Goethe solía veranear. 

Otoño 

Septiembre 

El otoño es tiempo de buena comida y vino: la Oktoberfest de Múnich comienza cada año a finales de septiembre y reúne a millones de visitantes de todos los rincones del planeta. Si la cerveza no es lo tuyo, en septiembre también se celebra la mayor fiesta del vino del mundo: en Bad Dürkheim, en Renania-Palatinado, el “Wurstmarkt” es la ocasión perfecta para sumergirse en la cultura vinícola alemana. 

Octubre 

¿Quién tiene la calabaza más grande del mundo? Si quieres saberlo todo sobre esta hortaliza naranja, la mayor exposición de calabazas del mundo te espera en Ludwigsburg. Además, el Europapark de Rust se vuelve en esta época más terrorífico que nunca – Halloween se celebra aquí durante todo un mes. Numerosos eventos, como el Festival of Fear, no son aptos para cardíacos. 

Noviembre 

Visitar un castillo envuelto en niebla es una experiencia mágica. El castillo de Neuschwanstein parece sacado de un cuento de hadas, y la fortaleza medieval de Eltz, en la región de Eifel, rezuma historia por los cuatro costados. Las leyendas y cuentos populares alemanes cobran vida en estos lugares y a lo largo de la Ruta Alemana de los Cuentos. 

Invierno 

Diciembre 

En época de Adviento, los mercadillos navideños que llenan Alemania son perfectos para pasear y disfrutar de las delicias típicas El Striezelmarkt de Dresde, además de ser el más antiguo, es también uno de los más encantadores: no te puedes ir sin probar el Christstollen, el dulce navideño por excelencia. 

Enero 

Cuando llega el mes más frío del año, no hay nada mejor que entrar en calor en unas buenas termas, como las de Baden-Baden. Si quieres disfrutar del invierno de forma activa, apúntate a una ruta guiada con antorchas por la garganta nevada de Breitachklamm, en el Allgäu. O practica esquí en los Alpes. 

Febrero 

¿Febrero te parece gris y aburrido? ¡Ni hablar! En Alemania, febrero se llena de color y brillo: vive el Carnaval a lo grande en Colonia, rodeado de bufones y carnavaleros, o acércate a Berlín para codearte con estrellas del cine en la Berlinale. Ambas ciudades merecen una visita en cualquier época del año, pero estos dos eventos son de lo mejor y no te los puedes perder.