Alemania y la defensora de la Amazonia
En la antesala de la COP30 que se desarrollará en Belén, Marina Silva destaca la sociedad con Alemania en materia de protección climática, solidaridad y protección de la Amazonia.
Marina Silva, la ministra brasileña de Medio Ambiente y Cambio Climático, es un símbolo de la lucha por la conservación de la Amazonia. La exactivista por el medio ambiente creció al borde de la selva tropical y lucha desde hace décadas por su protección. En la antesala de la Conferencia Mundial sobre el Clima COP30 en la ciudad brasileña de Belén, Silva ha destacado la importancia de Alemania como socia en la protección climática, incluso, ante la frágil situación política mundial: “Alemania y Brasil son un ejemplo en este contexto por aún mantener sus relaciones„ sus lazos de amistad, el comercio y, sobre todo, la solidaridad”, afirmó Silva en una entrevista actual con la Sociedad Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ). Asimismo, añadió que esto es “muy importante, dado que en otros lugares también somos testigos de evoluciones dolorosas y observamos cómo cooperaciones históricas, la solidaridad y las sociedades se hacen pedazos”.
En la previa de la Conferencia Mundial sobre el Clima COP30 en Belén, la ministra aseguró que Alemania es un importante socio de Brasil en el combate del cambio climático. Ambos países cooperan ya desde hace décadas, por ejemplo, en la protección de la selva tropical. La selva tropical amazónica desempeña un papel determinante para el clima del planeta. Alemania forma parte de los patrocinadores más importantes del Fondo Amazonia para la protección de los bosques y el clima, el mayor mecanismo financiero a nivel mundial destinado a la disminución de las emisiones generadas por la deforestación y la degradación forestal.
Marina Silva centra su atención en más retos en la materia, como la aplicación firme de los acuerdos ya alcanzados en relación con la protección climática en el plano internacional o la justicia climática entre el Norte Global y el Sur Global. Asimismo, afirma que la comunidad internacional debería abordar la ampliación de las energías renovables, el aumento de la eficiencia energética y un “abandono justo y vinculante de los combustibles fósiles”.
Cooperación polifacética con Alemania
Para la ministra, la cooperación con Alemania tiene importancia a largo plazo: “Se trata de dar y recibir, de solidaridad y colaboración. La única manera de alcanzar nuestros objetivos es a través de la cooperación técnica, del intercambio que mantenemos y de una cooperación con recursos, pero no solo financieros, sino también humanos”. Esto se refleja en un intensivo diálogo germano-brasileño que se extiende desde la formación profesional hasta el intercambio de expertos y expertas en materia climática.
Aquí puede leer la entrevista de la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) con Marina Silva.