Un año de reformas sociales

En Alemania entra en vigor en 2023 una de las principales reformas sociales del Gobierno federal actual: la renta ciudadana (“Bürgergeld”). Hubertus Heil, el ministro federal de Trabajo, dice que se trata de la “mayor reforma del Estado de bienestar desde hace 20 años”. Además, desde principios de enero las familias reciben una mayor prestación por hijos. Aquí, un panorama de los cambios en las prestaciones sociales en Alemania.

Prestación por hijos

El 1 de enero, la prestación por hijo a cargo, antes escalonada, pasa a ser uniforme: 250 euros al mes por cada hijo. Ello supone 31 euros más al mes por el primer y segundo hijo hasta los 18 años y 25 euros más por el tercero. Las familias con tres hijos recibirán así casi 90 euros más al mes.

Renta ciudadana

La renta ciudadana sustituye en enero de 2023 a la anterior ayuda para desocupados. En Alemania, el sistema se conocía como Hartz IV. Además de un aumento de las montos de más de 50 euros al mes, en el nuevo sistema se hace hincapié en que el beneficiario encuentre un trabajo fijo en lugar de empleos temporales. A los solicitantes se los cualificará mejor para que encuentre un trabajo y serán apoyados para acceder a cursos de formación profesional. Al inicio de la percepción de la renta ciudadana, los beneficiarios deben poder concentrarse por completo en la búsqueda de un empleo. El primer año de desocupación se considera consecuentemente un periodo de espera, en el que la renta ciudadana se paga sin tener en cuenta ni la propiedad de una vivienda ni el patrimonio del solicitante. Las prestaciones para niños aumentarán en hasta 44 euros por mes. En el futuro, las necesidades ya no se ajustarán retroactivamente, sino que se ajustarán de acuerdo con la tasa de inflación. El Bundestag y el Bundesrat aprobaron la renta ciudadana en noviembre de 2022 tras largos debates.

Cualificación y recualificación

A partir de julio de 2023, se apoyará de forma aún más intensiva a quienes deseen formarse o cambiar de profesión. Por ejemplo, una cualificación profesional será financiada tres años en lugar de dos. Quienes deseen continuar su formación pueden recibir una ayuda mensual adicional de 75 a 150 euros, dependiendo de si la cualificación incluye la obtención de un certificado final o no. En el futuro, la finalización de la cualificación tendrá prioridad sobre la colocación en un puesto de trabajo. Hay bonificaciones por aprobar los exámenes intermedio y final.

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