Apostar por la sociedad civil

Señor Welzer, usted ha elogiado como un "momento mágico de la democracia" la acogida de un gran número de refugiados entre 2015 y 2016, y el compromiso social con quienes buscan protección. En el ínterin, sin embargo, ha tenido lugar un acalorado debate sobre el asilo, que ha causado graves trastornos políticos.
Lamentablemente, desde de 2015 no se ha apoyado sistemáticamente el compromiso democrático expresado en la ayuda a los refugiados. En vez de ello se ha agigantado la queja del creciente número de refugiados, y que esto supone una amenaza para nuestro país. En este sentido, la situación actual es completamente diferente.

¿Qué condujo a esta situación?
Aparentemente, los políticos se sintieron impulsados por el partido populista de derecha AfD. Al mismo tiempo, los medios de comunicación y el debate político eran casi monotemáticos: solo se hablaba de los refugiados y la inmigración. Ese fue el tema que ha enfrentado la gente aquí en los últimos dos años y medio, aunque en realidad hay algunas otras cosas que son más importantes para Alemania. Desafortunadamente, desde un punto de vista social-psicológico, hay que decir que precisamente esta monotematización crea cambios. Las personas perciben las cuestiones de manera diferente cuando se les comunica de la manera en que se les comunica actualmente sobre el asilo.

También se ha criticado mucho el "lenguaje tóxico" utilizado en el debate. ¿Usted también ve esto como parte del problema?
El lenguaje es un factor esencial en el cambio social. Todos los populistas de derecha utilizan la expansión de lo expresable como estrategia exitosa. Lo peor es cuando de repente también en el campo convencional se cruzan los límites de lo que se puede decir, como por ejemplo con el término "turismo de asilo".

¿Qué le da esperanza?
Mucho. Desde hace unas semanas hay manifestaciones en muchas ciudades alemanas, que insisten en el rescate de náufragos como un derecho. La gente está luchando contra la criminalización de los rescatistas de náufragos y personal de ayuda humanitaria. Nosotros mismos estamos iniciando la campaña "No en mi nombre" junto con otras organizaciones. Probablemente hay muchas personas que no están de acuerdo con el cambio de lenguaje y de programa, pero que no se sienten identificados con ningún partido u organización.

¿Así que usted apuesta por la sociedad civil?
¿Por quién si no? La política hace lo que dicta la sociedad civil. La mayoría ha guardado demasiado silencio en los últimos tiempos. Los otros son más ruidosos y han logrado sugerir a los políticos que sus demandas son las más importantes. Ahora los "buenos" también tienen que hacerse oír.

Harald Welzer es cofundador y director de Futurzwei - Stiftung Zukunftsfähigkeit y profesor de diseño de transformación en la Europa-Universität de Flensburg. Anteriormente fue director del Center for Interdisciplinary Memory Research y jefe de varios proyectos en el Instituto de Estudios Avanzados de Humanidades de Essen (KWI) en Essen.

Entrevista: Helen Sibum.

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