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Los jóvenes preservan la memoria histórica de testigos contemporáneos

¿Cómo se documentan las historias de los supervivientes del Holocausto? La organización Zweitzeugen muestra la manera de conseguirlo en Alemania, trabajando activamente con los jóvenes. 

Autora_Vanessa_SchmidtVanessa Schmidt , 17.01.2024
Niños y jóvenes comprometidos en la lucha contra el antisemitismo.
Niños y jóvenes comprometidos en la lucha contra el antisemitismo. © Dominic Fehr

Niños y jóvenes cuentan sus historias cuando los testigos vivientes del Holocausto ya no pueden hacerlo en persona. Este es en esencia el trabajo que la asociación “Zweitzeugen” realiza en Alemania. Los voluntarios alientan a niños y jóvenes a conocer las biografías de los supervivientes del Holocausto, a preservar sus recuerdos y darlos a conocer. Porque los supervivientes del Holocausto son ya muy mayores, y pronto ya nadie podrá contar sus historias en primera persona.  

Cerca de 22.000 niños y jóvenes participan de forma activa en la organización y luchan por combatir el antisemitismo y la discriminación. Desde su fundación en 2014, la organización anima a la juventud a asumir compromisos sociales. Para poder llegar a los niños y a los jóvenes, existe un concepto educativo en forma de talleres y proyectos, realizados en colaboración con los colegios. “Se trata en particular de llegar a aquellos cuyo entorno familiar y social les impide acceder a la oferta educativa”, explica Christina Walther, de Zweitzeugen. Pero, ¿cómo se establece el contacto con los testigos actuales para que compartan sus biografías con los jóvenes? 

Segundos testigos preservan los recuerdos de los supervivientes del Holocausto.
Segundos testigos preservan los recuerdos de los supervivientes del Holocausto. © Zweitzeugen

En sus inicios, la organización se dirigió activamente a museos, instituciones judías y particulares. En la actualidad existe una extensa red. La organización entrevista a supervivientes del Holocausto y documenta las historias en una especie de registro, así como en podcasts, con los que los niños y jóvenes siguen trabajando en un siguiente paso. Por otra parte, Zweitzeugen también les proporcionan material para realizar una clasificación científica e histórica de los relatos. Todos los segundos testigos reciben simbólicamente un carné, nos cuenta Walther: “Las biografías se completan con la redacción de cartas a los supervivientes y a sus familias.”  

La organización también mantiene un estrecho contacto con los supervivientes. Los voluntarios dialogan con ellos y les informan regularmente sobre el trabajo de la organización. Hasta la fecha se han realizado 37 entrevistas. A fin de desarrollar la labor educativa en el futuro, la organización señala que también se abordarán las historias de otros grupos étnicos, como los sinti o el pueblo gitano.