"Las personas son la prioridad"

Bangladés, Ucrania, República Democrática del Congo: como responsable de Ayuda Humanitaria del Ministerio alemán de Asuntos Exteriores, Susanne Fries-Gaier vive de cerca las catástrofes humanitarias. Nos explica cómo está ayudando Alemania y los retos a los que se enfrenta la ayuda humanitaria.

Sra. Fries-Gaier, Alemania presta ayuda humanitaria en numerosos países. ¿Cómo ha sido el compromiso de Alemania recientemente?
Según estimaciones de Naciones Unidas, unos 340 millones de personas dependen actualmente de la ayuda humanitaria, más que nunca. Esto obedece a varias razones: las crisis duran cada vez más. Muchos países aún están lidiando con las consecuencias de la pandemia y el cambio climático está haciendo inhabitables amplias regiones del planeta. Luego está la guerra de agresión rusa contra Ucrania.  

Por este motivo, Alemania ha intensificado su ayuda humanitaria. En 2022 destinamos 3.200 millones de euros, frente a los 500 millones de 2015. Esto convierte a Alemania en el segundo mayor donante después de Estados Unidos. Proporcionamos ayuda financiera a organizaciones humanitarias y respondemos directamente a catástrofes naturales, como las inundaciones de Pakistán o el terremoto de Turquía y Siria, a través de nuestros colaboradores, como el Servicio Alemán de Protección Ciudadana (THW). Pero igualmente importante es abordar las causas de los conflictos. Asimismo, intentamos actuar de forma predictiva, lo que no sólo es más digno, sino que también ahorra costes a largo plazo. 

¿Qué se entiende por ayuda humanitaria predictiva?
La ayuda humanitaria predictiva se basa en la idea de ayudar a la gente antes de que se produzca una crisis. Tomemos como ejemplo la plaga de langostas de 2020/2021 en el Cuerno de África: para hacer frente a dicha plaga se emplearon 230 millones de dólares estadounidenses. En principio parece mucho dinero, pero evitó daños por valor de 1.700 millones de dólares estadounidenses. Alemania se ha comprometido a dedicar el 5% de su presupuesto total de ayuda humanitaria a la respuesta predictiva ante catástrofes humanitarias y también lo promueve ante otros países donantes, porque estamos convencidos de que es la forma correcta de actuar.

¿Qué retos presenta el cambio climático de cara a la ayuda humanitaria?
El cambio climático afecta sobre todo a los más pobres entre los pobres. En el Cuerno de África, por ejemplo, ya son cinco años consecutivos sin las esperadas estaciones de lluvias. Esto supone que franjas enteras de tierra se vuelven inhabitables.  

Por esta razón, la ayuda humanitaria debe coordinarse aún mejor con la cooperación al desarrollo y la consolidación de la paz. En el caso del Cuerno de África, esto supone que la ayuda humanitaria atenúa las pérdidas de las cosechas y, al mismo tiempo, la cooperación al desarrollo ayuda a la población para que pueda utilizar sus campos incluso en las nuevas condiciones. Además, se trata igualmente de prevenir los nuevos conflictos provocados por el cambio climático, por ejemplo en lo que se refiere a la distribución del agua y de la tierra.

Desde hace más de 50 años, la ayuda humanitaria es un pilar central de la política exterior alemana. ¿Qué ha cambiado en este tiempo?
Por desgracia, la ayuda humanitaria es cada vez más importante, pero también cada vez más difícil. La idea original consistía en prestar ayuda a corto plazo en casos de emergencia, tras lo cual los agentes del desarrollo tomarían el relevo. Pero éstos necesitan un gobierno operativo que actúe sobre el terreno. Estos ya no existen en muchos contextos. En Siria o Afganistán, los agentes humanitarios son, por tanto, a menudo las únicas organizaciones humanitarias sobre el terreno. 

Por otro lado, la ayuda humanitaria se ha profesionalizado mucho en los últimos años. Desde 2016, las partes interesadas colaboran para que el sistema sea aún más eficaz y sensible a las cuestiones de género. En la actualidad, la ayuda humanitaria está mucho más enfocada a dar prioridad a las personas afectadas y a sus necesidades. Las organizaciones locales no sólo deben ser meras ejecutoras, sino que también deben poder decidir el destino de la ayuda. 

¿Qué es lo que le impulsa a implicarse en la ayuda humanitaria?
Lo que me mueve es probablemente lo mismo que a todos los que se dedican a la ayuda humanitaria: sabemos que lo que hacemos permite salvar vidas y aliviar el sufrimiento. En mis viajes he podido comprobar cómo nuestros fondos humanitarios ayudan directamente a la gente. Estoy muy orgullosa de que Alemania se implique tanto en la ayuda humanitaria. 

Cómo ayuda Alemania; aquí encontrarás más información.