“La generación joven me da esperanza”
El “afrofluencer” Stève Hiobi ofrece una perspectiva distinta de África. En esta entrevista, conversamos sobre el poder de las redes sociales, el coraje que se necesita para adoptar una postura y las relaciones globales.
El coraje es como un músculo: hay que ejercitarlo. Te presentamos a personas que inspiran con su valentía: personas que dan un paso al frente con determinación, ya sea por el clima, la educación política, el entendimiento entre pueblos o la defensa de quienes buscan refugio.
Habla sobre África de forma distinta, personal y alejada de los estereotipos habituales. Stève Hiobi, también conocido como “deinbrudersteve” utiliza sus canales de redes sociales para explicar relaciones globales, clasificar desarrollos actuales y visibilizar perspectivas africanas. En sus canales, lleva a sus seguidores a la cumbre del G20 en Sudáfrica, presenta start-ups exitosas del continente africano y expone cómo la moda rápida afecta enormemente a las personas de Ghana y el medio ambiente.
Stéve Hiobi, muchas veces se le llama “afrofluencer”. ¿Cómo describiría usted lo que hace?
El concepto creo que es acertado. Soy influencer y escritor y me dedico, sobre todo, al continente africano. Cuento historias de África que en la percepción pública de Europa suelen pasar desapercibidas. La intención es explicar, eliminar prejuicios y, en particular, despertar algo de curiosidad.
¿Qué fue lo que despertó su curiosidad por África?
Nací en Camerún, pero crecí en Alemania. Por mucho tiempo, no me he sentido ni alemán ni camerunés. Y, en algún momento, quise entender mejor mi propio trasfondo y analizar mi identidad. Desde que nació mi hijo, ese deseo se hizo más fuerte también porque me gustaría poder responder a sus preguntas algún día.
¿A qué prejuicios sobre los países africanos suele enfrentarse en su trabajo?
Uno de los prejuicios más persistentes es la percepción de que lo que sucede en África “no afecta en absoluto al Occidente”. Sin embargo, por ejemplo, la inestabilidad en la República Democrática del Congo demuestra que todo está estrechamente vinculado: afecta a nuestras cadenas de suministro de materias primas, nuestros móviles y nuestra vida cotidiana.
¿Se necesita coraje para hablar sobre estos temas públicamente y adoptar una postura?
A veces sí. Antes de ser “afrofluencer”, hacía vídeos graciosos. Abandonar ese camino y dedicarme a temas serios que muchas veces también son controvertidos fue un paso valiente. Desde luego, a veces me enfrento a discursos de odio en Internet, pero me gusta mucho el intercambio con mi comunidad.
¿Qué le infunde esperanza?
Por un lado, ese intercambio. Muchas personas me escriben que mis contenidos les impulsan a observar con más detenimiento, investigar mejor y hacer un análisis más intensivo de las perspectivas africanas. Por otro lado, la generación joven me da esperanza. En Europa, pero, sobre todo, en África. Los jóvenes exigen a sus Gobiernos que asuman responsabilidades y quieren que se les escuche. Las redes sociales ayudan a poder acceder al diálogo. Eso me genera optimismo.