Buenas ideas contra la escasez de agua
El agua escasea en muchas regiones del mundo y el cambio climático agravará aún más la situación. Estas ideas innovadoras ayudan a ahorrar agua.
Agricultura urbana con ciclo de agua cerrado
La producción de alimentos en las ciudades es una nueva tendencia de la agricultura orientada hacia el futuro. Un enfoque con un consumo de agua particularmente bajo es la acuaponía. Ese método, desarrollado en Alemania, combina la piscicultura con el cultivo de hortalizas. La idea: el agua de la piscicultura se reutiliza para las plantas, cuyas raíces se hallan directamente en el agua. Como el agua contiene mucho amoníaco debido a las excreciones de los peces, es necesario un paso intermedio: bacterias convierten el amoníaco en nitrato, que las plantas absorben como nutriente a través de sus raíces. El agua libre de nitratos fluye de vuelta a los peces. El ciclo cerrado del agua hace que este método sea particularmente interesante para las regiones con escasez de agua.
Cómo ahorrar agua en la agricultura: con sensores
Una gran cantidad de agua utilizada en la agricultura se pierde en la tierra o se evapora sin ser aprovechada por las plantas. Por ello, la empresa alemana ZIM Plant Technology ha desarrollado sensores que se fijan en las hojas y determinan exactamente cuánta agua necesitan las plantas. Similares a monitores de presión sanguínea para seres humanos, los sensores miden la presión celular interna de las hojas y transmiten los datos a un servidor. La presión en las células permite determinar si las plantas tienen un buen o mal suministro de agua. Ello permite irrigarlas de forma óptima.
Recuperar agua del aire
Abastecer de agua potable a la población mundial es uno de los desafíos más importantes de cara al futuro, especialmente en las megalópolis o en las regiones particularmente áridas. Pero agua está disponible también allí: en forma de humedad del aire. El Instituto Fraunhofer de Ingeniería de Interfaces y Biotecnología ha desarrollado un proceso que capta agua del aire. Una solución salina altamente concentrada absorbe la humedad del aire. De la solución salina de menor concentración resultante, el agua se separa de la sal mediante un evaporador de vacío. El sistema funciona con energía fotovoltaica o eólica y, por lo tanto, es autosuficiente en cuanto a energía y neutral en cuanto a CO2. Actualmente se prueba una planta de demostración sucesivamente en varios lugares, para optimizar la tecnología.
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